¿Tú hijo come bien? ¿Por qué mi hija no come verduras ? La preocupación por la alimentación de nuestros hijos es totalmente natural y comprensible.
Cada niño tiene un ‘estilo de alimentación‘, igual que nacemos con un temperamento determinado, hay niños inapetentes, niños que tienen muy buen apetito y disfrutan comiendo y probando sabores y texturas nuevos. Existen diferencias interindividuales en la alimentación que son normales, no hay que angustiarse ni comparar con otros niños. Es habitual que les cueste probar cosas nuevas, que se aferren al pecho o al biberón y que no quieran cuchara, que coma poquito o sólo ciertos alimentos. Forma parte del proceso de desarrollo y a veces no es tan fácil como podemos ver en los manuales de pediatría, blogs de nutrición infantil…
Desde la Escuela os dejamos algunos consejos para mejorar los hábitos de alimentación de vuestros hijos:
- Respetar ritmos, no introducir de forma precoz alimentos ni cambios. Hasta los seis meses lactancia materna exclusiva o lactancia artificial. A partir de ahí, y siguiendo las recomendaciones del pediatra, ir introduciendo poco a poco los sólidos y alimentos nuevos.
- Paciencia y perseverancia. Dadle a probar los mismos alimentos cocinados de distintas formas. Si no lo quiere esperad unos días, y volved a intentarlo.
- Si no quiere comer, no forzarlo ni tenerle delante del plato mucho tiempo, no guardarle para la merienda y luego para la cena el mismo plato. No ir detrás del niño con la comida por toda la casa.
- La manera adecuada de hacerlo es; presentarle la comida en la mesa, darle un tiempo prudencial y normal para que la coma. Y después de ese tiempo, retirarle la comida. No ofrecerle nada de postre “porque apenas ha comido”.
- Comer en familia es muy importante, los niños aprenden mucho a través del modelado o imitación.. Respetar los horarios de comida.
- No hace falta que coma todo tipo de verduras o de fruta. Si le gustan tres o cuatro verduras, dadle más a menudo esas, y poco a poco id introduciendo nuevas.
- Evitar que la comida sea una moneda de cambio. Sed pacientes ante los cambios.
“La alimentación en la primera infancia hay que vivirla con tranquilidad y disfrutando cada etapa”
Saludos Salados.