13 May EDUCAR DESDE LAS EMOCIONES
La educación se ha ido transformando en algo más que una mera institución que transmite conocimientos. Vivimos el momento de la creatividad, la innovación, la transmisión de valores… y la emoción; porque, ¿de qué sirve transmitir tantos conocimientos si luego el niño no sabe vivir en sociedad o decir lo que siente a las personas que le rodean?
Está demostrado que los niños sólo aprenden realmente si es de forma significativa, es decir, si lo vive, disfruta o experimenta. Así, lo aprendido permanece en la memoria a largo plazo. La familia es la primera escuela de emociones desde que nacen, junto con los docentes que también son modelo a seguir. Como buenos agricultores que somos, plantamos una semilla en el corazón de los más pequeños, dejando una huella tan profunda que marca la diferencia entre simplemente enseñar o educar con amor; tan profunda y significativa que los marca como personas en la forma de ser y estar en el mundo en un futuro.
Si educamos desde las emociones, tendremos éxito en la educación .